jueves, 17 de noviembre de 2016

38 días

Hola.  Eso es.  Quedan 38 días para navidad.   La típica frase cliché:  qué rápido pasa el tiempo.
Y parece que mientras mayores nos hacemos, el tiempo pasa más y más rápido, como para recordarnos que nuestra vida tiene un fin.  
Yo no pienso en mi muerte, aunque sí pienso cómo me gustaría morir:  a lo cobarde, durmiendo en mi cama.  Me aterroriza morir en un accidente, asesinada, quemada o ahogada.  Le tengo miedo al dolor físico, tengo poca tolerancia.
Sabemos que la navidad es una fecha ficticia, está más que demostrado que Jesús no nació un 25 de diciembre, pero ya está instaurada y aunque lograran determinar la fecha exacta, jamás se va a cambiar la fecha.   Cosas del ¿ser humano?, ¿la iglesia?, no lo sé.  Supongo que las tradiciones son difíciles de cambiar.
No sé por qué me dio por pensar en esto.  Será porque no me gustan estas fiestas, lo he dicho tantas veces, ¡qué majadera!.   Es que se ha vuelto tan consumista, que no me gusta nada. Aunque realmente no es mi caso.  Nosotros no caemos en la vorágine de los regalos ni nada de eso.  Nos hacemos un regalo pequeño entre nosotros (Robin y yo).  Les hago un regalo a mis hijas (nada caro) y listo.  Y cuando viajo a Santiago, a veces les llevo un engañito a mi familia, pero no me gasto el sueldo del mes y del otro y menos todavía contraemos deudas.

Ahora estamos en plan de ahorro porque tenemos que cambiar la camioneta en diciembre.  La fiel Yoli (siempre les he puesto nombre a los vehículos) nos ha servido mucho tiempo, se ha portado bien, pero ya hay que cambiarla.  Así que el cinturón está apretado.

Pero igual nos la pasamos bien, tampoco nos ponemos avaros ni tacaños.  Si no disfrutamos ahora de la vida ¿cuándo?.

En fin, me fui en la volada como se dice.  No tengo fotos que mostrar porque ya las mostré todas.   Así que les dejo esta perorata que se me ocurrió hoy.

Un beso a todos, Los aprecio de verdad.
Maru

5 comentarios:

  1. Me has acelerado, 38 días uf ya me tengo que poner en marcha y sin pausas. Voy a preparar listas de tareas. Un abrazo

    ResponderBorrar
  2. Nosotros ya no celebramos la Navidad, unas fechas muy tristes.
    Un abrazo guapa

    ResponderBorrar
  3. El teatro de cada año.
    Yo ya ni caso....

    Venga, un beso.

    ResponderBorrar
  4. A mi tampoco me gustan estas fiestas, siempre me acuerdo de las personas que están solas, que no tienen nada, que no son felices y ese recuerdo constante de felicidad les debe doler.

    Pero como buena contradictoria que soy, las celebraba a lo grande cuando mis hijos eran pequeños, ni siquiera están bautizados, pero daba igual, hacía un Pesebre con musgo, río, pastores y ovejas, y hasta hacíamos avanzar a los Reyes.

    Pero tampoco faltaba el árbol natural que tratábamos de salvar cada año plantándolo en el jardín de los abuelos, alguno sobrevivió. Quería que ellos sintieran y disfrutara de todo lo que yo no tuve.


    Ahora sin tanto teatro, también me las ingenio para que mi nieta sienta algo de la magia que quedan de estas fiestas.

    El año pasado hicimos un belén casero con papel, plastelina y lana. No veas, Maru la pinta del Rey Negro, Mi nieta lo quitaba y decía "éste no lo pongas, yaya, que es muy feo..." ja, ja, ja.

    Sea como sea no tiro la casa por la ventana, no me vuelvo locca, nunca he sido consumista.

    Pásalo de cine, Maru.

    Un abrazo,

    ResponderBorrar

El alma se alimenta de palabras, y tus palabras son muy importantes para mí. Déjame algunas y seré muy feliz.