sábado, 30 de noviembre de 2019

Que se vaya pronto el año

Hola, al fin por aquí, aunque sin mucha tranquilidad. Al final, lo de Melissa era más extenso de lo que pensaban, y en el borde de arriba del útero quedaron células que hay que vigilar muy seguido y con exámenes. Pero igual más tranquilas porque al menos no se ha ramificado.

Pero las cosas no han estado bien en general en temas de salud para mi familia. Mis padres están delicados los dos y ahora me tocó a mí de nuevo.

En julio me dio el primer cólico renal fuerte. Tanto que tuve que ir a la clínica. Me inyectaron medicamentos fuertes y medicina para el dolor, y después de unos días pasó.
Ahora en noviembre me volvió a dar. También fui a la clínica, me inyectaron, pero además, me hicieron un escáner. Me entregaron el informe y un CD, el CD no lo pude ver porque parece que necesitan un programa médico para verlo y mi compu ni siquiera tiene lector de CD.
Y a los días se me quitó el dolor, pero empecé a tener molestias para hacer pis. Y éste de color amarillo muy fuerte, medio turbio y con un olor muy fuerte. Total que dije: voy a ir al urólogo, porque debo tener una infección urinaria.
Y ayer fuimos con Robin y casi nos desmayamos. El doc vio el escáner y mi riñón derecho simplemente no está funcionando. Tengo una piedra de 1 cm obstruyendo el ureter, por lo que mi riñón está inflamado, y lleno de orina que no puede pasar. Me dijo que si hubiera ido en dos meses más, mi riñón se muere, porque esa piedra la tengo ahí desde julio, y como quedó pegada, se encapsuló y por eso no me dolía, y en noviembre seguramente quiso avanzar y de ahí el dolor de nuevo. Mi riñón izquierdo está hace 6 meses trabajando por los dos riñones!! pobrecito.
Cuento corto, me operarán el 12 de diciembre, me sacarán la piedra y limpiarán el riñón que está infectado. Es con anestesia general y eso me asusta un poco, siempre he tenido algún problema con las anestesias.

Así que el lunes tengo que hacerme un montón de exámenes, de orina, electrocardiograma y un algo (no me acuerdo) a mi cabeza loca.
Díganme si no tengo mala pata, o sea mi prontuario de salud es más largo que las cartas al viejo pascuero.
Uff, me desahogué. Gracias por leerme.

Espero con ansias el día que les pueda escribir alegre y contenta y por fin contarles algo bonito, gracias por su paciencia.

Ah, y las cosas en el país no han cambiado, el gobierno inoperante da aspirinas, no soluciones reales, y la represión ha sido brutal.

Un abrazo
Maru

lunes, 21 de octubre de 2019

Hola amigos

Les cuento que ya operaron a mi hija, salió todo bien, pero no podemos tranquilizarnos hasta saber los resultados de las biopsias que le harán a los tejidos que le sacaron.  Recién el 30 de noviembre lo sabremos.  Ella se siente bien, no tiene demasiado dolor, y ha evolucionado bien.

Por otra parte, mi país está en una profunda crisis, el pueblo despertó frente a los abusos del gobierno, y se manifestó, desde el jueves hay protestas en todo el país.  Al menos logramos que cancelaran un alza abusiva del transporte, pero son muchas las demandas sociales.
Tenemos estado de emergencia en diferentes regiones, y hasta toque de queda.   Chile tuvo su primer toque de queda desde la dictadura.  Los que crecimos en dictadura sufrimos un encogimiento de estómago al recordarlo.    Lo malo es que nunca faltan los vándalos que se aprovechan y destruyen y saquean.  Sacaron a los militares a las calles, lo que tampoco se veía desde la dictadura, salvo en una zona puntual para el megaterremoto del 2010.
Así que así estamos, el gobierno quiere instaurar el terror y el pueblo ya no tiene miedo.
Esperemos que algo se saque de este descontento ciudadano.

Un beso a todos, gracias por sus mensajes de ánimo por mi hija.

Maru

martes, 17 de septiembre de 2019

Parece...

Parece que no paro de darles malas noticias.  Desaparecí del blog porque a mi hija Melissa le detectaron un cáncer uterino, y bueno, se imaginarán.  He estado viajando seguido a Santiago, acompañándola a médicos, exámenes, etc.
No sabemos si está localizado sólo ahí.  Le harán un TAC para saberlo.  El médico dice que lo detectaron a tiempo, por lo que lo más probable es que esté localizado y encapsulado sólo ahí.
Estamos esperando cirugía, lo malo es que son las Fiestas Patrias y aquí se celebra casi todo el mes, así que tendremos que esperar a fin de mes o principios de octubre.
Ya sé que muchas mujeres lo han tenido, y que han salido adelante, a raíz de esto, me han contado muchas historias, buenas y malas.   Pero ¿saben?  no me sirven.  Me sirve que mi hija esté bien.  Un poco egoísta quizás, pero es así.

Ya les iré contando, ahora mi corazón de madre está encogido a su mínima expresión.

Saludos a todos
Maru

lunes, 8 de julio de 2019

Hola otra vez

¿Cómo están?  espero que todos bien.  Por aquí con un rudo invierno, mucha lluvia y frío.
Pero bien acompañada porque ya se vino mi hija Susi a vivir al otro departamento, que está en el edificio de al lado.  Así que feliz.   Y mi yerno es colombiano y me hace patacones, arepas y un montón de cosas ricas, ya le tengo que decir que pare porque voy a ponerme redonda.

No he hecho mucho, incluso todavía me quedan algunas cosas que ordenar.   Y la idea con Susi es hacer cosas para vender en la gran feria de navidad a fin de año,  pero tenemos que empezar ya, así que a ponerse las pilas.   Ellos todavía no trabajan, porque él está con licencia médicas y se las están pagando, la idea es que lo despidan para que le paguen la indemnización,  pero no quieren, así que sigue enviando licencias, no sé hasta cuándo.   Así se hacen las cosas aquí, todo con su maña, es una lástima, pero es la única manera.

En fin, no mucho que contar, tampoco he escrito, me he dedicado a ver series; acabo de ver Los últimos Zares, sobre Nicolás II de Rusia, es una serie docu, en Netflix y está muy bien.   Tengo muchas series pendientes de ver, así que tengo que ordenarme para no quedarme pegada. 

Les saludo a todos, y a ver si tengo algo más entretenido que contarles para la próxima.
Gracias por sus condolencias por Pablo, ya estamos más tranquilos.

Un abrazo a todos.
Maru

miércoles, 19 de junio de 2019

Y sucedió

Hola a todos.  Sucedió lo que esperábamos y el viernes, Pablo nos dejó.   Sabíamos que era lo mejor, pero igual duele, sobre todo a su mamá que se queda sola.   Era hijo único.
Pero en fin, supongo que era lo que tenía que pasar y ahora a seguir adelante.

Espero que ustedes estén todos bien y disfrutando del calor los del otro lado del charco.

Acá mucho viento, frío y lluvia.

Nosotros todavía ordenando después de la mudanza, no dejan de aparecer cosas, y todavía quedan en el otro departamento.  Mi hija no halla la hora de que las traigamos, jajaja.  Ellos de a poquito armando su nidito de amor.  Y todos contentos.

Les dejo unas fotos aéreas de Santiago en otoño, se ve precioso, aunque cuando no llueve la contaminación se adueña de la ciudad.









Me despido hasta la otra.
Maru





lunes, 10 de junio de 2019

Otra vez




Hola amigos.  Vengo triste.  La tragedia nuevamente azota a mi familia.
Tengo un sobrino que tuvo un accidente cerebral y se desplomó en la calle, a tres minutos de su casa, no saben si le reventó un aneurisma, le dio un síncope cardíaco u otra cosa.  Lo operaron de urgencia y encontraron un desastre en su cerebro.
Y está en la UCI sin esperanza.  Sólo su corazón lo mantiene vivo, pero los doctores dicen que no se recuperará.  Tiene muerte cerebral y se va deteriorando cada día.

Sólo estamos estamos esperando.  Estamos muy tristes.  En cuatro años, dos sobrinos se han enfrentado a la muerte.  Consuelito partió, Pablo, queremos pensar que se recuperará, pero no podemos tapar con un dedo el sol.
Sólo pedimos que si se va, lo haga en paz y no sufra.  

Esto me hace pensar en lo efímera  que es la vida.  En lo importante que es vivir el aquí y el ahora, en que no debemos ser mezquinos con nuestro amor; hay que decirlo, manifestarlo, probarlo día a día.  Y vivir a concho, como si fuera el último día, porque la única certeza que tenemos al nacer, es que algún día moriremos.

No quiero ponerme trágica, que sea lo que la vida, el universo, dios, la energía o como quieran llamarlo, lo llene de luz y ejerza su poder.

Abrazos
Maru

viernes, 31 de mayo de 2019

Mudanza






¡Hola a todos!  Espero que estén todos muy bien.
Bueno, como dice el título, nos estamos cambiando de departamento.  Y ya se imaginarán el caos.
Y más encima no ha parado de llover.  Lo bueno es que nos mudamos al edificio de al lado.
No sé si les conté que mi hija menor, Susana, se viene a vivir a Valdivia con su pareja, y le alquilaremos este departamento.  La tendré cerquita y eso me pone muy contenta.
Por eso paso rapidito para saludarlos y decirles que no los olvido y espero que no me olviden.
Un besote grande a cada uno.
Maru

jueves, 9 de mayo de 2019

Vengo contenta

Hola! ¿cómo están? Como dice el título vengo contenta después de semanas de tribulaciones e inciertas.

Bueno, les cuento.

Hace un mes más o menos me salieron unas cosas raras en las piernas, estómago y brazos.  Era como cuando uno se insola y se le empieza a caer la piel quemada, sólo que esto era rojo y raro.
Fui al médico que me ve siempre y no le gustó mucho lo que vio y ahí empezó la romería de exámenes.  Pero no me dio indicio de qué podía ser.  Ahora sé por qué.

Incluso tuve que ir a Santiago a hacerme algunos exámenes bien complejos.  
Bueno, en resumen, lo que tenía era indicador de Lupus.  Estas escaras disminuyeron y desaparecieron después de un tiempo tomando un medicamento.

Y.....    aunque tengo una predisposición al Lupus, que se podría desarrollar en algún momento, el tema es que AHORA NO LO TENGO.

Y no saben lo feliz que estoy, porque Fibromialgia y Lupus no es muy buena mezcla.

No sé qué pasará a futuro, tal vez tengo un  cheque a fecha, pero no importa, HOY no lo tengo y con eso me basta.  

Es para celebrar ¿no creen?

Les dejo un abrazo a todos, gracias por su paciencia conmigo, jajaja.  Ya vendrán post más divertidos.
Maru

lunes, 29 de abril de 2019

Aquí estoy

Hola amigos, ha pasado bastante tiempo.   Han pasado muchas cosas, no malas, pero que me han tenido en un estrés constante.  Espero ya llegue el día en que pueda estar más tranquila.

Estuve en Santiago, con mi familia, hijas, en la parcela, fue agradable, aunque se me hizo largo.  Ya quería venirme a casa, como siempre me pasa.

No voy a poner fotos, sólo quería saludarlos y pedirles buenas vibras, las necesito.
Pronto les escribiré de nuevo.

Un abrazo,
Maru

viernes, 29 de marzo de 2019

¡Aquí vengo!

Hola, prepárense porque traigo muchas fotos.
Primero decirles que el viaje estuvo espectacular.  Nos fuimos de aquí a Los Ángeles a buscar a mi cuñada y concuñado.  Al otro día tempranito partimos a La Serena.  Paramos a almorzar en la playa de Los Vilos y se me ocurrió comer piures, que me encantan.  Me enfermé, parece que no estaban muy frescos, o estaban congelados, no sé, pero esa noche casi me muero.  Bueno, llegamos a La Serena, buscamos alojamiento y encontramos una cabaña hermosa con vista al mar y con una terraza donde reunirse a tomar una copa.
De ahí recorrimos La Serena y Coquimbo que está al lado.  Yo lo que más quería era ir al Valle del Elqui, cuna de Gabriela Mistral y donde están las mejores destilerías de pisco.
Realmente hermoso, a mi cuñada y a Robin no les interesaba tanto (incultos ellos, jajaja) pero ante la presión, fueron igual.  Lindo el museo, muestran dónde vivía, había muebles y enseres.  También muchas fotos de sus libros, sus escritos, etc.  Realmente bello.
Ese día tuve que comer puro arroz, buaaahhh.
Después fuimos al embalse Puclaro, que abastece de agua a todo el valle, pues la zona es bastante desértica.   Las vistas son muy bellas, pero el viento nos llevaba.
Por supuesto en la noche íbamos a cenar a algún lugar rico, y en uno de ellos, nos encontramos con una tuna y nos sacaron a bailar a mi cuñada y a mí, así que a hacerle empeño.
Las tunas, además de una deliciosa fruta, son un grupo de universitarios que se dedican a tocar instrumentos y cantar, vestidos como en la época medieval.  Cuenta la historia que estos grupos entretenían a las cortes en los palacios de reyes y aristocráticos.
Al otro día nos fuimos a Coquimbo, almorzamos y nos embarcamos en un Catamarán; nos dio una gran vuelta por la bahía, pasando por islas de rocas donde habían lobos de mar y pelícanos.
Y, ¡oh sorpresa!  había una pirata que nos amenazaba a cada rato con tirarnos al mar, jajaja, fue muy simpático, cantaba, hacía de guía turística, las hacía todas.
Después, al otro día, nos fuimos  a  Olmué, un pueblito al interior, muy caluroso, almorzamos en un restaurante muy recomendado en la tele,  y partimos a Valparaíso, puerto principal.  Encontramos un hotel en los cerros, muy bonito, con una vista lejana al mar, pero hermoso, ahí paseamos un poco y al otro día nos fuimos.  Pasamos a almorzar a Linares y nos fuimos de vuelta a Los Ángeles y al otro día tempranito nos vinimos Robin y yo a Valdivia.
Como ven, fue un lindo paseo, la compañía fantástica y ya con planes de otros viajes, ahora hacia el sur.

Lo otro es que por fin firmamos la escritura del otro departamento, así que luego nos tocará la mudanza (Dios me ampare) .   Éste lo vamos a arrendar y así se pagará solo.  Así que contentos, ya que salió largo el trámite, casi un año.

¿Y qué más contarles? que nos vamos a Santiago para Semana Santa.  Hace tiempo que no veo a mis padres ni a mis hijas.

Y ya, no los aburro más.  Y les dejo las mil fotos de rigor.




El embalse Puclaro en La Serena



Una fruta típica de la zona, copao,  no me gustó mucho, es parecida al kiwi, ácida, la sirven con una cucharita y azúcar o endulzante.


 

Vista del valle del embalse


El faro de La Serena


Coquimbo, la cruz del milenio, construida en el año 2000



Aquí estamos en uno de los brazos de la cruz.  Esta cruz es más alta que el Corcovado de Brasil.



El museo de Gabriela Mistral



La cama donde dormía




La famosa tuna


Una pequeña botella para el camino jajaja



La cena con la tuna de fondo, antes de que nos sacaran a bailar.



Recorrido por las destilerías de pisco




Con un maqui sour, regalo para una amiga




El viaje en el barco pirata.


La pirata

Logramos doblegarla




Valparaíso, vista del puerto desde el hotel.  En Valparaíso todo son cerros, hay ascensores y escaleras por todos lados.  Nosotros subimos un par de escaleras y quedamos plop con mi cuñada.



Con Pablo Neruda en el hotel


Con Gabriela Mistral



El árbol del dinero.  Los turistas dejan billetes.  Se ve lindo.  Es un pub


La plaza Sotomayor, en homenaje a las glorias navales (cuáles? no sé, jajaja)


En el puerto se trabaja 24 horas cargando y descargando containers





Y eso sería, espero no haberlos aburrido.  Ya quiero viajar de nuevo!  me encanta.
Les dejo un abrazo a cada uno.
Maru







lunes, 18 de marzo de 2019

¡Y lo hice de nuevo!

¡Sí!  Cumplí otro año el 7.  Cada año pasa más y más rápido o así me parece.
Celebré dos veces.  Una con mi prima y mi sobrina el mismo día, y después el sábado con los amigos, lo pasamos bien, nos dio por cantar y  teníamos todo un concierto hasta las 6 de la mañana, menos mal que las paredes son gruesas, así que ningún vecino se quejó. 

Mi salud ha estado bastante bien, espero que siga así, ahora que ya se acaba el verano y vienen los fríos y la humedad.  

El jueves nos vamos a unas mini vacaciones a La Serena, al norte, con un clima agradable y muuuuchos mariscos, ñam ñam, ya se me hace agua la boca.

Les dejo fotos de las dos tortas.

Torta de hojas


Aquí la otra, y yo con mi amigo Andy, y Robin espiando detrás, jajaja.


También tuvimos la visita de un amigo de Robin del trabajo con su esposa, y lo pasamos muy bien.






Como ven, estoy muuuuy gorda, no hay caso, con lo golosa que soy...





El viernes 8 me sacaron ¡23 lunares!, en cara, cuello y espalda.  Fueron 23 pinchazos para la anestesia, ufff, pero ya pasó, y ahora con crema regeneradora para que no queden cicatrices ¡ojalá!  No quiero ni marcas ni cicatrices.

Y bueno, me despido hasta la otra.  Vendré a la vuelta y les traeré impresiones de mi mini viaje y por supuesto, fotitos.
Un abrazo a todos, gracias por estar ahí.
Maru

viernes, 22 de febrero de 2019

INDIFERENCIA

Me urgía encontrar trabajo.  No era fácil, joven, pero poca experiencia.  Había trabajado aquí y allá y hubo largos períodos de cesantía.
Al fin conseguí una entrevista en un prestigioso estudio de arquitectos.  Preparé mis bocetos, planos y mi poca experiencia en una ordenada carpeta.  Según yo, no debería irme mal, pues no pedían experiencia previa.  Era un estudio joven, aunque en poco tiempo se había hecho un nombre en el mundo de la arquitectura.
El día llegó y yo, con mi mejor traje, llegué diez minutos antes.  Pasados veinte minutos, la secretaria me hizo pasar a una oficina.  Abrió tan rápido la puerta que no alcancé a leer el nombre en la placa.  Sentada a un escritorio estaba una mujer joven, parecía más joven que yo.  Estaba mirando mi currículum y apenas levantó la vista para indicarme una silla donde sentarme.
No me sentí muy cómodo, algo me decía que no me iría bien.  Sin levantar la mirada me resumió el trabajo del estudio y lo que se esperaba del candidato al que contrataran. Le tendí mi flamante carpeta y la miró pero no la abrió, la dejó a un lado y puso mi currículum encima.
Siguió viendo unos papeles y de repente se dio cuenta de que yo seguía ahí;  me dijo que estaban entrevistando a otras personas y que me avisarían en caso de sí o de no.  Y sin más palabras, me despidió al tomar el teléfono.
Me fui algo frustrado, no me hizo ninguna pregunta, en realidad, casi no me miró.  ¿Cómo elegiría a  la persona para el puesto?
En fin, con el ánimo por el suelo, me fui con la sensación de haber perdido otra batalla.
Di un par de vueltas para calmarme, y decidí almorzar en un café restaurante pequeño que encontré después de caminar un tramo.
Entré y me senté al fondo, no quería encontrarme con nadie conocido, quería ser invisible en ese momento.  Además, desde allí podía entretenerme mirando a los comensales .  Era hora de colación, así que empezaron a llegar grupitos a sentarse en diferentes partes.  Y entonces la vi; la mujer que me había entrevistado.  Entró conversando y riendo con tres compañeros.
Tomaron asiento en una mesa cercana.  Me vio, estoy seguro, un segundo su mirada se detuvo en mí y siguió hablando con sus compañeros mientras tomaba asiento.  Quedó a mi vista, pero en ningún momento miró hacia donde estaba yo.
Me sentí mal, no sabía por qué.  Había estado en la oficina de esa mujer por lo menos diez minutos y era como si nunca me hubiera visto.
Recordé que casi no me miró, que nunca pronunció mi nombre, ni tampoco se presentó.
Y ahí estaba, compartiendo un ameno almuerzo con sus colegas, hablando y riendo como se hace con los conocidos.
Y ahí lo supe .  Lo que me había frustrado y me había hecho poner hasta mal genio. 
Su indiferencia.  Sí, esa indiferencia con la que me trató toda la entrevista e incluso ahora.
Eso definitivamente echó a perder mi día.  
Nunca supe quién era realmente, pues a los pocos días recibí un correo diciéndome que no había sido elegido.  Otra frustración.  
No dejo de pensar qué hubiera pasado si me hubieran dado el trabajo y tuviera que verla todos los días.
¿Me vería? ¿Se aprendería mi nombre? ¿Tendría que trabajar con ella?  
En fin, me quedé sin respuestas; sólo con su indiferencia y sin trabajo.
Maru
Febrero 2019



jueves, 14 de febrero de 2019

Las berenjenas y yo

Hola!  ¿les ha pasado que se niegan a probar algo porque "sienten" que no les va a gustar?  Bueno, a mí me ha pasado, primero con las lentejas, no las podía ver, pero cuando niña me dejaban toda la tarde con mi plato hasta que me las comía, cosa que raramente hacía, con el castigo correspondiente.

No recuerdo que en mi casa se haya hecho berenjenas.
Pero nunca me interesé por ellas, porque había escuchado que eran amargas, etc.  Y recién este año tomé la decisión de probarlas  ¡y me enamoré!  me encantaron.  Así que ahora son uno de mis platos favoritos.  Las salteo en una sartén, le pongo champiñones, sal, aliños y al final dos huevos, revuelvo todo y ¡voila! un almuerzo sano y nutritivo.   

Lo de las lentejas fue muy raro, yo estaba embarazada de mi hija mayor, Melissa, y me dio por comer lentejas, cosa que nunca había hecho de buenas ganas.  Lo más raro es que les echaba el jugo de un limón, y me parecía la cosa más rica del mundo.  Ahora no soportaría comerlas así, pero desde esa fecha, las como con gusto.

Cosas raras que pasan.  Lo que sí nunca he podido pasar, es el zapallo amarillo,  no, no hay caso, siempre lo dejo a un lado, eso no ha cambiado ni con los embarazos ni la edad.  

En fin, ¿qué manías tienen Uds. con la comida?  La verdad es que yo tengo muchas.   

¡Feliz día del Amor y la Amistad!  Los quiero mucho y espero que nos leamos mucho tiempo más.

Un beso.
Maru













domingo, 3 de febrero de 2019

¡ANIVERSARIO!





Síiiiiii, mi blog cumple 12 años, ya no es mi bebé, ya está a punto de entrar en la aborrescencia.  ¿Cambiará? ¿Me querrá todavía? o pensará que lleno sus hojas prístinas de tonteras sin importancia.  Quién sabe.

Han pasado tantas cosas en estos años, me enfermé, me compré un departamento, perdí mi trabajo (gracias a Dios nunca más trabajé), me pensionaron, me trasladé de ciudad y hasta ¡me casé!  algo que no hubiera imaginado en mis más locos sueños.

Agradezco a los que todavía me siguen, por supuesto, la audiencia ha cambiado, muchas amigas y amigos ya no pasan por aquí, muchos cerraron sus blogs hace mucho tiempo.  No voy a negar que a veces me dan ganas.  Cuando veo en otros blogs, 40, 50 o más comentarios, y el mío no llega a los 5 la mayor parte de las veces, me dan ganas de olvidarme y dejarlo, porque a veces tampoco se me ocurre qué escribir.  Pero no me voy a rendir, me gusta tenerlo, me gusta escribir, no importa cuántos me lean.  Lo raro, es que veo las estadísticas y veo que me lee mucha gente que no comenta.   Por ejemplo, mi anterior post, el del terremoto, lo  leyeron 34 personas.  Y por esas personas, mis amigos anónimos, seguiré con mi blog.

Les reproduzco mi primer post, ese que escribí un 3 de febrero por allá por el 2007.

Les dejo mis cariños y mis agradecimientos eternos.
Maru




Hola. Tengo fama de ser buena para escribir. Y ahora que tengo todo este espacio en blanco para hacerlo, no sé qué escribir. Así son las cosas.
De momento la vida no me tiene muy contenta, será que no me ha dado mucha tregua últimamente y aunque trato de estar optimista, calmada y serena, es harto difícil cuando ves que una parte de tu vida se desmorona a tu alrededor y poco puedes hacer.
Pero bueno, de todo hay que aprender, y seguiré adelante con mi vida, sea que me traiga cosas buenas o no tanto, seguiré siendo yo y ustedes tendrán que seguir soportándome, jiji.
Espero que este blog no sea tan serio como yo, y que lo disfruten y a ver si comentan en buena onda alguna vez.
Un saludo para todos los que están ahí asomados a la ventana.
Maru

miércoles, 23 de enero de 2019

El número uno del año

Hola a todos...

Como Chile es Chile, empezamos el año con un terremoto en la cuarta región.  Lejos de donde yo vivo.  Pero murieron dos personas y hubo muchos daños y alerta de tsunami.  

 Fue 6,7 en la escala Richter, y 8 en la escala de Mercali, que mide la intensidad sentida por las personas.

Parece que va a ser un año movidito.   Espero que no haya más desgracias humanas.

Les dejo fotos y me despido.

Maru













miércoles, 9 de enero de 2019

Lola

Lola siempre quiso ser cantante. No actriz, cantante.  No cantaba mal, había ganado concursos en el colegio, Universidad,  festivales, etc.
A veces cantaba en la noche en algunos pubs.
Lola soñaba con grandes escenarios, luces, cámaras y mucha gente aplaudiéndo y cantando con ella.  Pero su problema era que tenía pánico escénico.  Algo que no lograba superar.
Su familia no quería desilusionarla ni cortarle las alas; pero le decían que tenía que estudiar, que tenía que asegurarse la vida y seguir persiguiendo su sueño.
Lola iba a conciertos de artistas locales, se sabía todas sus canciones.
En su casa, tomaba su guitarra y se imaginaba cantando frente a un público que sólo ella veía.
Un día, llegó una gran artista internacional, y, por supuesto, ella fue a su concierto.  Había miles de personas.  Ella se sabía todas sus canciones.
Le gustaban mucho sus canciones, sobre todo el coro.
Era un tipo joven.  Hacía el coro somo solista, y su voz era tan linda, diáfana, pura, que Lola quedaba hipnotizada.
Un vuelco hizo saltar su corazón.  Y se le iluminó la ampolleta.
¿Por qué no intentaba ser corista de algún artista conocido?
Podría cantar en grandes escenarios sin acaparar toda la atención.  Y la maquinaria empezó a trabajar.  Grabó canciones de demo.  Fue a todas las casas disqueras.  Muchos fracasos, algunos aciertos.  Se comunicó con los representantes de varios artistas nacionales.  No le fue muy bien, pero no se rindió.
Se buscó trabajo en pubs, cantando los fines de semana en diferentes locales.  
Pero su sueño era mucho más grande.  Ahora tenía la convicción de que le iría bien, de que algún día estaría detrás de algún gran artista, y, ¿quién sabe?
Algún día aquella gran artista podría ser ella.


Ojalá les guste.  
Cariños a todos
Maru