viernes, 19 de febrero de 2021

Sin adornos

 Estaba ahí a la deriva, muy herida tras ese naufragio, no olvido que en ese viaje dejé todo de mí.

Miraba  desesperada por asirme a lo que fuera para no ahogarme, pues me quedaba mucho por hacer aún...
y... apareció aquel botecito,
se veía tan frágil como yo me sentía,
subestimé... me llevó a tierra firme.

Sin adornos.... sólo eso

6 comentarios:

  1. Un botecito llamado "milagro".

    :)

    Buen fin de semana.

    Besos.

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  2. Un bote a tiempo es una salvación, hay que aferrarse a cualquier cosa. Abrazos

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  3. No hay que perder nunca la esperanza.

    Besos enormes.

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  4. Cuando ya no nos queda la esperanza del gran milagro que cambie lo que nos hace infelices, aparece un pequeño bote salvavidas al que nos agarramos mientras recuperamos fuerzas para seguir el viaje.

    Bello y poético, Maru.

    Un abrazo,

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El alma se alimenta de palabras, y tus palabras son muy importantes para mí. Déjame algunas y seré muy feliz.