Apenas te he dejado
vas en mí, cristalina
o temblorosa,
o inquieta, herida por mí mismo
o colmada de amor,
como cuando tus ojos
se cierran sobre el don de la vida
que sin cesar te entrego.
Amor mío
nos hemos encontrado
sedientos y nos hemos
bebido toda el agua y la sangre,
nos encontramoscon hambre
y nos mordimos como el fuego muerde,
dejándonos heridas.
Pero espérame,
Pero espérame,
guárdame tu dulzura.
Yo te daré también
una rosa.
Pablo Neruda
hermoso
ResponderBorrarTQM