Un día en el expreso de Soria a Monterde,
vi que subía un hombre con una oreja verde.
No era ya un hombre joven sino más bien maduro,
todo menos su oreja, que era de un verde puro.
Cambié pronto de asiento y me puse a su lado
para estudiar el caso de cerca y con cuidado.
Le pregunté: esa oreja que tiene usted, señor
¿cómo es de color verde si ya es usted mayor?
Puede llamarme viejo - me dijo con un guiño -
esa oreja me queda de mis tiempos de niño.
Es una oreja joven que sabe interpretar
voces que los mayores no llegan a escuchar:
Oigo la voz del árbol, de la piedra en el suelo,
del arroyo, del pájaro, de la nube en el cielo.
Y comprendo a los niños cuando hablan de esas cosas
que en la oreja madura resultan misteriosas...
Eso me contó el hombre con una oreja verde
un día, en el expreso de Soria a Monterde.
Gianni Rodari (enviado por Paz G.) Dibujo de Susi
QUIERO UNA OREJA VERDE.....PORFIS....¿HABRÀ ALGUIÈN QUE ME PUEDA REGALAR UNA?
ResponderBorrarBESIOS
Tienes un "cariñito" en mi Blog, dedicado con mi oreja azul.
ResponderBorrar;)
Eso sí que es un adelanto en la evolución. Todos deberíamos de conservar al menos una oreja de esas (y un ojo, a ser posible).
ResponderBorrarEnhorabuena por el premio, claro que te lo mereces.
Un abrazo.
BELLISIMO.
ResponderBorrarte dejo un beso enorme
CECI